lunes, 22 de febrero de 2010

II

Pero no siempre fue así; lo sé... En algún momento existí; estoy seguro.
Y aunque mi mente divaga entre lo que fue, debió ser y hubiera sido, aún extraño demasiado (quizá en realidad no tanto) como todas las cosas solían ser.

Alguna vez alguien me dijo: -Para que una historia sea considerada una buena historia, debes de empezar desde donde todo comenzó, desde el comienzo-del-principio-.

Para qué malgastar tiempo especificando nombres, lugares y fechas si todo se podría resumir a que fui un hombre feliz, tal vez no feliz como los caballeros de las historias que salvan doncellas, ni como un pirata que lucha contra bestias míticas no vistas por el ojo humano alado de su tripulación, ni como un buen padre trabajador que día con día al llegar a casa es recibido por su amada familia. Yo era; más bien, feliz como un un solitario viajero.
Un vaquero que cabalga sin rumbo fijo bien-aventurándose entre bosques enigmáticos.
Un caza-recompensas que vive sin importarle nada ni nadie más, sí, ese solía ser yo.

¿Que si viví? 
Algunos pretenciosos dirían que de más.
¿Que si maté? 
Solo al que fallo al honor.

¿Qué si amé? 

..Ahí es donde nuestra historia tiene su primer tropiezo..


domingo, 21 de febrero de 2010

I

Era uno de esos días perfectos de otoño tan comunes en las historias y tan raros en el mundo real; un día perfecto para cualquiera, pero no para mí. 
Llevaba 518 días encerrado, recluido en ésta soledad, mi única compañía fueron esas interminables botellas de ron y las docenas de cigarrillos en el piso; consumidos, aplastados... casi como tu recuerdo.
Ebrio. 
Sucio. 
Inexpresivo. 
Yací inerte más de lo que mi intoxicada memoria me permite recordar. 
Ni siquiera podía diferenciar entre lo que viví y lo que soñé... quizá la diferencia era que por lo menos en mis sueños se murmuraba esa canción, o tal vez era el ron que nublaba mis sentidos; no lo sé. 
Ella, mi esperanza constante. 
Y yo, atrapado entre las sombras.

A pesar de tan larga estadía y aunque ahora se los narro desde un lugar recurrido por el odio y la desgracia el cual estoy seguro jamás han visitado...

...recuerdo exactamente lo que aquél día me deparó.
el principio del fin

Ése día todo cambiaría.